Las farolas solares se componen principalmente de cuatro partes: módulos solares fotovoltaicos, baterías, controladores de carga y descarga y accesorios de iluminación.
El cuello de botella en la popularización de las farolas solares no es una cuestión técnica, sino una cuestión de costes. Para mejorar la estabilidad del sistema y maximizar el rendimiento basándose en la reducción de costos, es necesario hacer coincidir adecuadamente la potencia de salida de la célula solar y la capacidad de la batería y la potencia de carga.
Por este motivo, no bastan los cálculos teóricos. Debido a que la intensidad de la luz solar cambia rápidamente, la corriente de carga y la corriente de descarga cambian constantemente y el cálculo teórico generará un gran error. Sólo mediante el seguimiento y monitoreo automático de la corriente de carga y descarga se puede determinar con precisión la potencia máxima de salida de la fotocélula en diferentes estaciones y diferentes orientaciones. De esta manera, se determina que la batería y la carga son confiables.
Hora de publicación: 20-jun-2019